Sudamérica

Cogí un Ferry desde Buenos Aires a Colonia , que tardaba cerca de una hora. De allí cogí un Bus que me llevaba directamente a Montevideo , todo incluido en el billete del Ferry.De camino a Montevideo decidí tomar otro autobús con destino a punte del Este , ya que se acercaba el fin de semana y quería un poco de movimiento , además de disfrutar nuevamente de la playas del Atlantico.




En punta del Este estuve un par de días ,donde visite la ciudad ,sus playas y sus alrededores.Es el Ibiza sudamericano compartido con Viña del Mar en Chile ,aunque por entonces era ya el final del verano y se estaba bastante tranquilo.










Estuve dando una vuelta con una amiga uruguaya llamada Cecilia que trabajaba en el Hostel en el que me hospedaba y que incluso me dejo su bici para recorrer la zona .Me recomendó no perderme la puesta de sol , la cual no me defraudo.


Conocí a muy buena gente en el hostel de punta del Este como la ya mencionada Cecilia, Natalia la cual volvería a ver en Montevideo, ya que me había invitado a pasar unos días en su casa; un chaval americano llamado Chris que me recordaba a mi amigo Jaime y dos estudiantes portorriqueños residentes en Argentina con los que iría seguidamente a Cabo Polonio:un lugar paradisiaco en la costa uruguaya.











Por supuesto no me podía ir de Punta del Este sin probar la noche , y aunque no había demasiado gente no defraudo en absoluto y termino a lo grande....











Después de allí me fui a Cabo Polonio.Es un lugar situado en un cabo , rodeado de dunas y con casitas desperdigadas donde no hay mas luz que la que proporciona el sol y la Luna y a la cual solo es posible acceder por medio de un todoterreno o una caminata de horas por las dunas.





El lugar es maravilloso y practicamente no aparece en ninguna guia, en sus playas se pueden observar lobos marinos y desde el faro las vistas del cabo son espectaculares.Es un lugar ideal para perderse varios días con tu pareja y desconectar del mundo. Para llegar tuvimos que conectar dos autobuses , mas el 4x4 que cruzaba las dunas.Fue un poco liante , pero finalmente llegamos a cabo Polonio y no nos decepciono en absoluto.Solo estuve un día , pero lo suficiente como para ver el encanto del lugar.La vuelta fue algo menos complicada , aunque de poco no me quedo en tierra.El autobús iba lleno y el conductor nos dejo ir , eso si sentados en el suelo.Era un viaje de 4 horas a Montevideo que prometía ser bastante incomodo.Como caída del cielo apareció una preciosa mujer llamada Vicky la cual pasaba por malos momentos que se convertiría en mi compañera de suelo en el bus.Quizás en otras circunstancias algo hubiera sucedido.... pero no quise aprovecharme de la circunstancia.Al finalizar el viaje me despedí de ella con la incertidumbre de si la volvería a ver....










Me fui con los portorriqueños a un Hostel situado en el centro histórico de Montevideo llamado Splendido Hotel (http://www.splendidohotel.com.uy/ ).Ellos volvía Buenos Aires al día siguiente y yo todavía iba a estar unos días mas por Montevideo , quizás también a la expectativa de que sucedería con Vicky.Los demás días en Montevideo me aloje en casa de Natalia, la uruguaya que conocí en punta del Este. Ella vivía en Pocitos un barrio muy bonito pegado a la costa.Finalmente deje Montevideo sin ver a mi chica del bus , aunque si que charle con ella en varias ocasiones.


Decidí irme a Colonia del Sacramento, una ciudad costera en el rio de la Plata , con mucha historia y que fue declarada como Patrimonio de la Humanidad....Además desde allí salia mi Ferry de vuelta a Buenos Aires. Me aloje en el Hostel el Español, el cual es el que mejor esta de precio.



Allí me volví a encontrar con el chaval Americano Chris.El primer día en Colonia alquile una bicicleta con la que visite todos los puntos de interés de la ciudad y sobre todo sus playas.Con una bici ,un día es suficiente para conocer Colonia.



Uruguay es un país pequeño si lo comparas con la mayoría de los países sudamericanos, pero es grande en cuanto encanto .Posee preciosos parajes naturales y kilómetros playas salvajes y paradisiacas, además por supuesto de sus guapas mujeres de sangre caliente y una simpatía sin igual muy lejos de la gran mayoría de sus vecinas argentinas.

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